Habría sido (fragmento)




Si hubiéramos tenido un hijo
antes de echarte para ser tu amiga
antes de ser vos un poco padre mío
para protegerme noches y días

Si hubiéramos mirado a alguien más,
desviado el ojo de nuestras pequeñas cosas
porque nos queríamos,
-la base está – dirían.
Entonces ahora, no alcanza pero es suficiente
con que tengas tu novia madura
y yo mi vida inmadura
menos aburrida que esos domingos a la tarde
(que igual extraño)
El ritmo sosegado de los grillos a la hora del té
Las regaderas abriéndose al cortar la tarde
y tus hermanas hablando todas juntas,
veloces como el batido de ese merengue
que espuma en grande
para desinflarse horas más tarde entre restos de torta devorada,
culpando a tu madre por haber envejecido, sin decírselo
es que no ve bien y los cuchillos quedan sucios
Y tu papá, siempre enojado por ser viejo,
sintiéndose algo inútil entre mujeres que poco entienden
que su aspiración fueron todas ellas
pero sin él como parte.
En vano es decirle que también existe una perfección:
mirar desde el final el principio
Y hay que estar preparado para largos años
de pompa almidonada y olores de cocina
bibliotecas leídas, gobelinos pasteles
sin ninguna declaración de guerra.

Yo quería eso cuando me casé con vos
No al viejo triste que me prestaba sus libros,
contándome una y otra vez su propia historia
de luchas y lucros
Quería, si
la cadencia de los actos cotidianos
idealizaba con poder extender el humo del café
asignar la hora de la cena, renovar el balcón cada primavera
poner una mesa para 4, para 6, para 15
y que me salga el flan de tu mamá.
Una rutina que nos encuentre dispuestos
a la reproducción de efectos secundarios,
los que debajo sostienen ese pacto
de certeza.
Me quedó la reiteración casi vacía
inmenso globo inflado de sueños
una idea minúscula y redonda
como esas tacitas de porcelana que five o´clock
ritualizaban la parte baja de mis tardes niñas
descubriendo de una caja floreada en rosa
té frío para visitas de mentira.


Si hubiéramos tenido una hija,
habríamos encontrado un camino a tanto logro acumulado
y sería más comprensible esta extraña comunión.
Finalmente, un retozo hubiese habitado el mundo
nuestro y de nadie más.
Tus ojos o los míos, que importa, pensaba yo
si tiene una cola tan linda como la tuya y es mujer,
combo completo.
y que no tenga mis caderas
ni esta urgencia de cambiar siempre
tampoco tu facilidad para decir que no.
Que no sea una versión mejorada
que nada más tenga tu culo y tu sonrisa
para verla ir o venir...
y que se duerma en el arrorró de tu espalda.
Se la hubiese cedido.
Habría sido quien concede
golosinas a la hora del puchero
mimando mi niña en la dulce simplicidad
Que reprobarías
Será que los grandes "no" se digieren después
mejor así?
Es tan saludable defender los si….
O simplemente se reconocen imposibles
Sujetándose al sostén de la memoria
que los actualiza
Cada vez que el hueco que dejaron
evoca una carencia nueva y similar
a esa primigenia
Oh no,
hay poco allí de muerte
Luego, una evidencia viable
elimina ese sueño devenido torvo
Y no es el mal menor, es lo logrado
Es tu mujer, mi carrera, los viajes,
otro novio, otro novio, otro novio
una secuencia fortuita de accidentes
para entrenar el espíritu.
Amontonamos proyectos indelebles
Reflujos, podrían llamarse
Deseos, les digo yo,
Epifanías madrugadas.

2 comentarios:

  1. Es muy bueno , me gusto.Es cotidiano y profundo con un toque de eternidad.Me deja la sensación de que lo trascendente es lo simple pero no todos lo entienden.

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  2. Y los que lo entendemos no siempre lo logramos:)
    Maldita modernidad, jaja
    Gracias y besos

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